La caliente adolescente de pelo rizado Barbie Rous acaba de terminar su curso de masajes, por lo que le ofreció a su compañero de cuarto Leo Santos un masaje gratis, pero con un motivo oculto: quiere tener en sus manos cada parte de él. Barbie comienza dándole un buen masaje en la espalda a Leo, pero cuando le pide que se dé la vuelta, también se engrasa el pecho hasta que su blusa blanca se vuelve transparente para que él pueda jugar con sus tetas. Barbie masajea la gran polla de Leo con sus manos, boca, tetas e incluso pies antes de subirse a dar un paseo. Luego es el turno de Leo de poner a Barbie sobre la mesa mientras le masajea el coño con la lengua y la polla.