Richelle Ryan y su marido tienen hambre, así que pide algo de comida, pero cuando la atractiva repartidora Aubree Valentine toca el timbre, Richelle se da cuenta de que parece querer devorar a la ardiente MILF. Richelle deja que Aubree haga precisamente eso, llevándola en una lancha motora con su gran trasero mientras Aubree le lame el coño. Después de que la repartidora se lo come a espaldas de su marido, Richelle la lleva al dormitorio donde saca el alijo de juguetes mientras se lamen, se tocan y se hacen tijeras hasta quedar satisfechos.