Chad Alva es un vecino tan servicial como uno podría pedir. Siempre está buscando formas de mantener seguro el vecindario y ayudar a sus compañeros propietarios si necesitan ayuda. Así que cuando oye a su vecina, Cubbi Thompson, gemir con urgencia… ¡decide que lo mejor que puede hacer es entrar corriendo a su casa para rescatarla! Pero cuando Chad corre a la habitación de Cubbi, se sorprende al descubrir que ella no está en peligro en absoluto… ¡simplemente está FAPPING! Chad se disculpa severamente y explica que, dado que la escuchó gemir, asumió que necesitaba ayuda. A Cubbi le divierte la caballerosidad equivocada de Chad… y le dice que mientras esté aquí, tal vez estaría dispuesto a ayudarla de alguna OTRA manera… ¡usando su polla para ayudarla a terminar lo que empezó!